Constelaciones familiares ¿Quieres saber un poco más?

Constelaciones familiares ¿Quieres saber un poco más?

La primera vez que escuché el nombre de las Constelaciones Familiares fue en el 2014, en un curso de inteligencia emocional que impartió mi querido Héctor Jorge Aymerich, llevó de invitada a Marta Montalvà, que gran regalo de la vida encontrarla en aquel precioso instante. Recuerdo aquella tarde en la sala de la biblioteca, junto con el resto de compañeros, cuando nos propuso hacer el sábado unas dinámicas de Constelaciones Familiares, ¿De qué? pensé yo. Nunca olvidaré aquella tarde, mi primer contacto con las Constelaciones Familiares.

Disculpa, aún no te he contado de qué se trata. Vamos a ello, las Constelaciones Familliares son una pseudoterapia, desarrollada por Bert Hellinger, a través de la cual la persona puede ver dónde tiene bloqueos que le impiden avanzar, se trabaja desde un lugar sistémico, es decir, no se trata de mirar tan sólo al individuo, sino todo lo que lo conforma, aquello con lo que está en relación. Así pues la constelación te ayuda a identificar esos patrones que se repiten en diferentes zonas de tu vida, como puede ser con las parejas, con tus padres, tus hermanos, tus amistades, el trabajo. En ocasiones estos patrones nos vienen heredados de nuestros ancestros, pues no sólo es el color de ojos y pelo lo que se hereda, sino que tal y como señala la epigenética hay mucho más que nos viene determinado.

¿Para qué una Constelación Familiar?

Hay muchas formas de tomar consciencia de estos patrones o bloqueos, en ocasiones una buena conversación, una película, un libro, una canción o incluso un sueño, pueden ayudarnos a hacer ese «click » y tomar consciencia de ese cuento que te cuentas, que se repite y verlo desde otro lugar. Sin embargo, para mi las constelaciones tienen un efecto exponencial. Me gusta hacer el siguiente símil; imagina estar dentro de una habitación a oscuras y de pronto, la luz se enciende. Hay ocasiones en las que nos encontramos en situaciones donde no vemos la salida, nos quedamos paralizados y no vemos más allá, se repiten de nuevo situaciones ya vividas, para mí es ahí donde la constelación te muestra la luz, para bien o para mal ves la realidad y una vez la has visto, ya no hay vuelta atrás, si vuelves a actuar como antes, es tú decisión y responsabilidad.

Tipos de Constelaciones Familiares.

Las constelaciones familiares pueden ser de dos tipos grupales o individuales. Tu decides cuál se adapta y ajusta mejor a tú necesidad y circunstancias.

  

 

 

 ¿Cómo es una sesión?

En función de si es individual o grupal, como has visto más arriba la duración varía, los participantes también, sin embargo, hay aspectos que no cambian, como son:

  • No es necesario tener experiencia.
  • Con una sesión es suficiente para poder ver lo que la constelación te muestra.
  • Te ayuda a tener una nueva mirada más amplia de la situación.
  • Te enfoca hacia la solución.
  • Sólo se necesita estar abierto de mente y darte permiso para sentir. 

A través de la entrevista con el facilitador, es la persona que «guía» la sesión concretas el bloqueo, eso que te impide avanzar, desarrollarte plenamente. Mediante preguntas se va viendo que elementos del sistema son los que hay que observar, no se  trata tanto de contar la historia que hemos aprendido o nos han contado, sino los hechos, lo que realmente ha pasado. Una vez concretado, se elige a los representantes, normalmente es el cliente el que los elige, en caso de ser grupal, se escogen personas que representan a estos elementos, si es individual mediante muñecos o papeles. Y se colocan estos representantes en el centro de la sala, estos representantes van sintiendo, teniendo emociones, el cuerpo les habla y es a través de esos movimientos y sensaciones que se va construyendo la constelación. Se dice que es un proceso fenomenológico, se va formando, creando en ese instante, se abre un espacio vacío en el cual ni el facilitador ni el cliente saben a dónde llegarán. Es gracias a ese no saber que se muestran los caminos hacia la solución. Se realizan movimientos, frases para poder llegar a un lugar donde los diferentes miembros del sistema consiguen estar en paz, para alcanzar su máximo desarrollo, como decía Bert Hellinger «La gran felicidad, está en consonancia con la vida». Esa vida que nos impulsa a seguir adelante y poder ver esos bloqueos que surgen en nuestras vidas, como retos para alcanzar nuestra maestría, oportunidades para ver de lo que somos capaces de sentir, alcanzar y experimentar.

Si quieres saber más solo hay una forma y es experimentarlo, ponte en contacto conmigo y seguimos.

 Salud y buen vida.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Mi madre y yo con Marta Montalvà

Mi madre y yo con Marta Montalvà

La vida sigue, siempre encuentra el camino para seguir adelante. Y nosotros podemos decidir estar y formar parte o quedarnos aún lado. En estos tiempos raros que estamos viviendo, siento más real que está en nuestra mano construir ese mundo en el que queremos vivir. Sí, existen limitaciones, obstáculos, leyes que nos impiden volar, tener abierto nuestro negocio, juntarnos con nuestros seres queridos….. Sin embargo, también nos brinda un regalo, una oportunidad, nos brinda un espacio para conectar con nuestra esencial, luego cada uno decide si conectar o no, la cuestión es que se nos ha planteado una situación perfecta para conocernos o desconocernos un poco más.

En mi caso toda la vida conmigo y aún me sorprendo, de lo poco que me conozco, como puedo ser incoherente, contradictoria, que no ver cosas de mí que el resto, la gente que me rodea, las ven claramente, para mi toda una sorpresa claro. Pues así creo que también al descubrirnos, podemos tener la oportunidad de ver que nos sucede con el resto de relaciones y sobre todo con las que son de toda la vida, esas que no recordamos ni los inicios, pues siempre han estado ahí y por eso quizá no nos paramos a reflexionar, a observarlas, ver como nos posicionamos, como nos mostramos , nos escondemos, nos defendemos, atacamos…..y para qué esos juegos, esas dinámicas, cómo surgen y qué nos están impidiendo hacer .

La más trascendental de todas creo que es la relación con la madre, ya no tanto la relación que se tiene diariamente, que también, sino esa relación que nos une con ella, que hemos interiorizado, un patrón desarrollado desde nuestro nacimiento, lo aprendimos para sobrevivir, lo sabemos de memoria, está en nuestro ADN, es un baile que cada una interpreta y despliega, en función de cada paso que da ella, la madre, nosotros reaccionamos. En ocasiones desde nuestra herida, desde esa niña que sigue buscando ese abrazo o esa mirada que en un momento le falto y se quedo ahí, esperando esa atención de mamá. Pasan los años y eso que seguimos necesitando, lo buscamos en el resto de relaciones, y hay una ley universal, «no puedes dar aquello que no tienes». La parte sabia sería conocerse, ser sincero con una misma y saber que es lo que tenemos para dar y saber pedir aquello que necesitamos para vivir, sin manipulaciones, sino desde la sinceridad y conciencia.

En constelaciones familiares, Bert Hellinger mostraba la relación directa entre la madre y la vida, en como aceptamos e integramos a una, esta implícita la relación con la otra. Si tenemos resentimiento, reproche hacia la madre, eso se verá reflejado en como vivimos, como nos relacionamos con la vida. De ahí la importancia que creo que tiene seguir mirando, reflexionando y poniendo atención sobre esa relación que tenemos con nuestra madre, esa que hemos interiorizado, que nos hemos contado y en ocasiones no tiene nada que ver con la relación real con nuestra madre.

Por eso para marzo vuelve el retiro de «Mi madre y yo» con Marta Montalvà, los día 20 y 21 de marzo, la ubicación en Mallorca, en un lugar aún secreto, será íntimo, acogedor, como el vientre de una madre, un espacio donde podamos sentirnos seguros, respetados y confiados. Para desde ahí Marta nos invitará a hacer un viaje, con sus diferentes paradas y tempos, en ocasiones hablaremos y compartiremos, en otras escribiremos, reflexionaremos, tendremos momentos de meditación, de conectar con nuestro cuerpo, con nuestras vivencias, de rituales de paso y transición.

Me gustaría acabar comentándote un poco más de de Marta Montalvà, que a mi me ayudó y ayuda tanto, pues mediante el respeto, la presencia, la ternura, sabe conectar, desde ahí se deja llevar. Tiene una gran formación y experiencia en métodos eriksonianos, coaching, terapia sistémica, escritura, constelaciones familiares . Aunque a mi me gusta definir el acompañamiento de Marta como sí hiciera acupuntura para el alma. En tantas ocasiones, intensidad no quiere decir profundidad, sino piensa en una caricia…..tan sutil y profunda. Como decía Carl Jung «Conozca todas las teorías. Domine todas las técnicas, pero al tocar un alma humana sea apenas otra alma humana».

Si te resuena, si quieres hacerte un regalo y hacer un regalo a las personas que tienes alrededor, te invito a compartir este encuentro el 20 y 21 de marzo de 10 a 19h. Si quieres más información o eres de los inconscientes como yo y ya quieres reservar plaza, ponte en contacto conmigo.

Nos encontramos en marzo, salud y buena vida.